Energía sostenible: avances, desafíos y futuro

En un contexto global de crisis climática y necesidad de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, Argentina se encuentra en una etapa clave de transición hacia una matriz energética más sostenible.
Con un vasto territorio, diversidad de climas y abundancia de recursos naturales, el país posee un enorme potencial para desarrollar energías limpias, aunque enfrenta desafíos significativos para alcanzar sus metas.
Panorama actual
La matriz energética argentina sigue siendo dominada por los combustibles fósiles, principalmente gas natural y petróleo, que representan más del 80 % del consumo total. Sin embargo, en los últimos años se ha registrado un crecimiento sostenido de las energías renovables no convencionales (solar, eólica, biomasa y pequeñas hidroeléctricas), que ya superan el 13 % de la generación eléctrica (Cammesa, 2024), acercándose a la meta de 20 % establecida por la Ley 27.191 para 2025.
Potencial en energías renovables

Parque Eólico del Bicentenario, Santa Cruz.
Energía eólica
Argentina cuenta con una de las mejores zonas para la generación eólica en el mundo: la Patagonia. Parques como Cañadón León (Santa Cruz) y García del Río (Chubut) son ejemplos de inversiones que ya están generando cientos de MW de potencia instalada.
Energía solar
En la región de Cuyo y el noroeste, provincias como Jujuy lideran la instalación de parques solares. El Parque Solar Cauchari, por ejemplo, aporta 300 MW, siendo uno de los más grandes de América Latina.
Biomasa y biogás
El sector agroindustrial argentino genera residuos que pueden transformarse en energía. Santa Fe, Entre Ríos y Córdoba concentran proyectos de biogás que alimentan la red eléctrica y reducen desechos.

Vista aérea de biodigestores en Zárate.
Impacto ambiental y económico
Se estima que en 2023 las energías renovables evitaron la emisión de 7,5 millones de toneladas de CO₂.
La inversión acumulada en el sector desde 2018 supera los USD 8.000 millones (Secretaría de Energía).
Además de beneficios ambientales, se generan empleos calificados en regiones alejadas de los grandes centros urbanos.
Desafíos pendientes
Infraestructura de transporte eléctrico: muchos parques están en zonas alejadas de los centros de consumo, requiriendo líneas de alta tensión.
Estabilidad normativa y financiera: las inversiones dependen de marcos regulatorios estables y acceso al financiamiento internacional.
Desarrollo tecnológico nacional: incrementar la fabricación local de componentes para reducir la dependencia de importaciones.
Hacia el futuro
Con recursos naturales excepcionales y un marco legal que incentiva el desarrollo, Argentina tiene la posibilidad de convertirse en un actor relevante en la transición energética global. Proyectos vinculados al hidrógeno verde y al almacenamiento de energía ya están en etapa de planificación, marcando el camino hacia una matriz más diversificada y sostenible.