Las bolsas hechas de mandioca que en el mar se convierten en agua
Son hechas con fibras y resinas naturales y se convierten en agua al contacto con la del océano. También sirven como abono y no son tóxicas.
El plástico es uno de los más grandes problemas ambientales de este tiempo. No hemos logrado reciclar todo el que producimos, y mucho de este termina en los ríos, mares y océanos, causando contaminación, intoxicación y muerte por asfixia en los animales.
Una novedosa bolsa podría ser lo que tanto necesitamos para contrarrestar el uso de polímeros. Este revolucionario producto está elaborado a base de fibras de la planta de la yuca (o mandioca, como la conocemos en Uruguay) y resinas de origen natural.
Fueron creadas por el biólogo indonesio Kevin Kumala, quien luego de 10 años estudiando en Estados Unidos, regresó a su natal Bali, capital del Indonesia, y encontró que las hermosas y soñadas playas de su infancia estaban sepultadas debajo de montañas de basura, que era arrastrada por la corriente mar adentro.
keyboard_arrow_right
Ecología
Imprimir
ÚLTIMO MOMENTO
La despenalización del aborto quedó frenada en Chile tras no lograr la aprobación en Diputados
La Feria de Camino Verde estará el 12 y 13 de agosto en el LATU
Récord en recaudación para Uruguay-Argentina
Siria reclama ante la ONU que la “coalición ilegítima” pague por la destrucción de la infraestructura del país
Evo Morales: “Es inadmisible y vergonzoso que Almagro rinda cuentas al Senado de EE.UU” por Venezuela
Iniciar sesión
Registrarse
keyboard_arrow_right
ECOLOGÍA
BUSCAR
Ok
COMUNIDAD
POLÍTICA
ECONOMÍA
DEPORTES
MUNDO
CULTURA
SALUD
CIENCIA
ECOLOGÍA
MUJER
TIEMPO LIBRE
NUTRICIÓN
Más Leídas
Opinión
Enredados
Entrevistas
Videos
Archivo
Muy interesante
Empresariales
Cartelera de Espectáculos
¡LO QUE NECESITÁBAMOS!
15 de julio de 2017, 15:07hs
Las bolsas hechas de mandioca que en el mar se convierten en agua
Son hechas con fibras y resinas naturales y se convierten en agua al contacto con la del océano. También sirven como abono y no son tóxicas.
Imprimir
Enviar por correo
S1LTjHpV-_720x0
El plástico es uno de los más grandes problemas ambientales de este tiempo. No hemos logrado reciclar todo el que producimos, y mucho de este termina en los ríos, mares y océanos, causando contaminación, intoxicación y muerte por asfixia en los animales.
Una novedosa bolsa podría ser lo que tanto necesitamos para contrarrestar el uso de polímeros. Este revolucionario producto está elaborado a base de fibras de la planta de la yuca (o mandioca, como la conocemos en Uruguay) y resinas de origen natural.
Fueron creadas por el biólogo indonesio Kevin Kumala, quien luego de 10 años estudiando en Estados Unidos, regresó a su natal Bali, capital del Indonesia, y encontró que las hermosas y soñadas playas de su infancia estaban sepultadas debajo de montañas de basura, que era arrastrada por la corriente mar adentro.
Diseñan bolsas que en el mar se convierten en agua
Solución ecológica
Kumala pensó que era “demasiado tarde para cambiar nuestros hábitos”, según explicó en una entrevista, y que parece bastante difícil que la gente deje de usar plástico o que lo recicle por completo. Entonces decidió centrar sus esfuerzos en encontrar un reemplazo, y descubrió en la yuca la materia prima perfecta.
En Indonesia se cultivan 25.2 millones de toneladas de esta planta al año, y logró sintetizas fibras de esta, replicando el proceso que se usa para fabricar bolsas plásticas a partir de petróleo, usando incluso la misma maquinaria.
A la vista y el tacto, las bolsas Avani I am not plastic (No soy plástico), como las llama Kumala, son iguales a las comunes, con la diferencia de que se biodegradan, se integran al medio ambiente y no son tóxicas ni para humanos ni para animales. De hecho, el joven científico grabó un vídeo en donde él mismo bebe un baso de agua tibia en el que diluyó una de sus bolsas.
El almidón de yuca contenido en estos productos se puede convertir en compost en menos de 100 días, en contraposición a los cientos de años que tarda una bolsa de plástico convencional en degradarse.
El costo de una bolsa I am not plastic es de cinco centavos de dólar, el doble que una común, pero es ciertamente más beneficiosa para el medio ambiente.
Fuente: LaRed21