Entre Ríos se libera de la pesadilla del fracking
Es una técnica usada en la exploración petrolera, especialmente en los combustibles no convencionales.
La Cámara de Diputados de la provincia de Entre Ríos aprobó por unanimidad durante la noche del martes la ley que prohíbe la técnica de fracturación hidráulica, conocida como fracking, en toda su extensión. Con esta iniciativa, la provincia es la primera en el país a convertirse definitivamente en territorio libre de fracking.
La medida se tomó en un momento clave de la actividad minera: no solo por la posible práctica del fracking en el yacimiento de neuquino de Vaca Muerta, sino también porque las mineras decidieron adherir a estándares internacionales de calidad a partir de los tres derrames producidos por la canadiense Barrick en el país.
“Este logro es resultado de la lucha de varias organizaciones, asambleas y movimientos sociales. Principalmente el trabajo de la Asamblea Ciudadana de Concordia, del Foro Regional Contra el Fracking, el Movimiento Argentina sin Fracking y de la Asamblea de Integración por Territorios Libres de Fracking.
Según Juan Pablo Olsson, integrante de Argentina sin Fracking. El trabajo también se extiende a la provincia de Río Negro, Neuquén, Santa Fe y Buenos Aires, donde se están discutiendo propuestas similares y la iniciativa debe ser replicada pronto. ”Esta aprobación debe ser un estímulo para una lucha mucho mayor, a nivel nacional y con el acompañamiento de otros países hermanos como Brasil, donde se ha prohibido el fracking en más de 300 ciudades, Uruguay, donde ya se prohibió en cinco departamentos, Chile, Paraguay, Bolivia, Colombia, México y otros”.
“Si queremos evitar los efectos más devastadores del cambio climático, que se están haciendo evidentes tanto en Argentina como en toda la región, con inéditas inundaciones, tenemos que detener cualquier tipo de inversión en combustibles fósiles y llevar a cabo definitivamente una transición hacia una matriz energética 100% renovable”, concluyó el ambientalista.
El proyecto aprobado en Entre Ríos une dos propuestas, una escrita por la ex diputada María Emma Barragán (Expte. 20.834), y otra del poder Ejecutivo (Expte. 21.206), y prohíbe la prospección, exploración y explotación de hidrocarburos por métodos no convencionales, incluyendo el fracking. Además, el proyecto destaca la importancia de la preservación del agua y el cuidado con el Acuífero Guaraní, la reserva de agua dulce más grande en el mundo.
El tema llegó a la legislatura provincial luego de que las acciones de las asambleas ambientales nucleadas en el Foro Regional contra el Fracking lograran que más de 30 concejos deliberantes establecieran la prohibición en sus localidades. La sesión llenó la sala de la Cámara de Representantes y la aprobación fue recibida con aplausos por los representantes de movimientos anti-fracking presentes. El despacho cuenta con la firma de diez diputados.
El mayor riesgo es cuando esta técnica se practica en lugares donde nunca hubo explotación petrolera. En las provincias como Santa Cruz, Neuquén o Chubut, donde ya hay explotación petrolera, las compañías se deshacen del agua utilizada para la actividad inyectándola en viejos yacimientos petroleros que están fuera de uso y esto es una técnica normal y segura.
Sin embargo, en otros lugares, como la provincia de Buenos Aires o Santa Fe, Entre Ríos, Corrientes, o Misiones donde nunca hubo explotación petrolera, se perfora un pozo hasta encontrar una formación geológica que permita admitir el agua. Esta inyección de agua, por ejemplo, en EE.UU generó movimientos sísmicos, desplazamientos de placas geológicas, y hasta terremotos que perfectamente puede tirar abajo una casa.
Fuente: Clarin